Visitamos la sede de Fritz Hansen en Copenhague y charlamos con Christian Andersen, director de diseño, y Tobías Jacobsen, diseñador y nieto del célebre arquitecto y diseñador Arne Jacobsen, figura clave en el funcionalismo danés. Pasado, presente y futuro del diseño a través de una mente visionaria.
Si nos fijamos en los orígenes de la marca, los primeros talleres de Fritz Hansen, los métodos de producción, todo ha cambiado tanto que parece una empresa diferente. ¿Es así realmente?
Christian Andersen
La respuesta es sencilla: no.
Creo que la razón por la que parece que ha cambiado es que el branding y el proceso de venta son completamente diferentes, pero los muebles se siguen fabricando casi de la misma forma. Utilizamos la misma tecnología.
Se ha transformado en una fabricación más moderna y eficiente, pero la esencia de cómo fabricamos, no importa si se trata de productos de madera o tapizados, son las mismas tecnologías. Seguimos haciendo tapicería tradicional y fabricación tradicional en madera y acero como siempre ha sido desde que abrimos esta misma fábrica en la que estamos ahora en 1950.
Es una fabricación muy artesanal, que, por supuesto, ha cambiado a un proceso más industrializado y mecanizado, pero muchos de nuestros productos todavía requieren manos; un producto bastante sencillo, como una silla de la serie Seven, todavía es manipulada por 11 pares de manos, desde la clasificación de la chapa hasta la costura y el pegado; todo se hace a mano. El lijado, el montaje de los submarcos y el ajuste para que se apilen perfectamente se hace a mano. De esta manera estamos seguros de que tenemos la calidad y el tacto adecuados.
¿Cómo se mantiene relevante y actual una marca que tiene un legado como este?
Christian Andersen
Tenemos la suerte de tener productos en nuestro portafolio diseñados por mentes capaces de crear algo que tiene un lenguaje o una forma universal, que tiene un reconocimiento inmediato por parte de todos como un producto hermoso, algo que deseas tocar y ver al instante, o que puedes visualizar al instante en tu hogar. Eso es una bendición.
Eso es algo que los diseñadores han hecho junto con Fritz Hansen, y hemos podido comercializar, fabricar y vender ese producto de manera que sigue siendo tan buscado como lo era en los años 50 o 60. No es algo que podamos lograr nosotros, son los clientes quienes lo hacen, son ellos quienes siguen enamorándose de nuestros productos.
Por otro lado, estamos constantemente tratando de mantener estos diseños vigentes en el tiempo, dándoles un nuevo vestido o un nuevo atuendo o una nueva atención o un nuevo color o una nueva circunstancia. Una nueva sesión de fotos, o un nuevo entorno inspirador, o una nueva forma de usarlo o combinarlo y, por lo tanto, adaptarnos a los cambios. No creo que usemos la palabra tendencia. No creo que nos importe lo que está de moda o de moda, sino lo que es sostenible, la solución adecuada. Así que hay muchas facetas de la curiosidad y de intentar ser relevante con un producto, pero creo que se debe principalmente a la base, al producto base, que tiene una capacidad tan fuerte. Hay muchas, muchas sillas con diseños más complicados que tienen más dificultades para diversificarse.
La sencilla silla 7, con patas de acero simples y delgadas, es un diseño que pide ser desafiado. Quiere tener colores. Quiere tener telas sobre ella, porque tiene un lenguaje de diseño tan simple e icónico que realmente puede representar telas de colores, o un color rosa fuerte, porque de alguna manera enfatiza el diseño del producto. Y esa es la clave para Jacobsen. Esa es la clave para muchos de sus productos, es que pueden adaptarse.
Buscamos nuevas interpretaciones del producto, pero de una manera muy cuidadosa, manteniendo el delicado equilibrio de cada pieza.
Tobias, ¿cómo te sientes al ver cómo ponen a prueba los diseños de tu abuelo de esa manera?
Tobias Jacobsen
Creo que es divertido. Todavía perseguimos sus ideas, porque eran tan modernas que son actuales y su diseño sigue siendo una fuente de inspiración a la que puedes recurrir.
Es divertido ver a otros diseñadores intentando hacer lo mismo, pero nunca lo consiguen. Creo que para igualar lo que hizo mi abuelo no hay que intentar hacer algo que se parezca a su trabajo, sino probar algo diferente.
Christian Andersen
Cada vez que necesitamos cambiar algo o desafiar algo, hablamos juntos, nos alineamos y usamos las capacidades de cada uno. Ese también es el espíritu de Arne Jacobsen. Si no hubiera sido curioso, nada de esto habría sucedido.
¿Cómo empezó a diseñar muebles?
Tobias Jacobsen
Creo que mi abuelo estaba un poco aburrido de hacer edificios.
Tenemos una postal que envió a su esposa desde Notre Dame du Haut de Corbusier, y escribe: «Esto es arquitectura”. Eso es lo que quería hacer, pero hizo casas. Tenía un gran deseo interior de hacer esculturas orgánicas, y por eso hizo el huevo, la silla de siete y tantas piezas y lámparas hermosas, que tenían ese toque escultural, que no podía usar en su filosofía de arquitectura, la Bauhaus, muy estricta… Muy hermosa, pero tal vez se aburrió de ella.
Christian Andersen
Tenía un dilema al trabajar con una arquitectura estricta. El diseño de mobiliario le liberaba a nivel creativo. Le Corbusier y otros también pintaron, tomaron fotografías, diseñaron, y puedes sentir cómo obtienen una especie de libertad con ello.
No hay restricciones técnicas o legales, es una forma de arte libre. Jacobsen creó su propio estudio para intentar encontrar ese equilibrio.
Jacobsen es uno de los nombres propios del diseño nórdico. A pesar de su estética inconfundible, ¿Diríais que está centrado en el uso y en las personas?
Christian Andersen
Cuando los arquitectos y los primeros diseñadores comenzaron a formarse en la escuela de diseño, con la influencia de la Bauhaus, el Art Nouveau y el Art Decó, los profesores de la Academia de Diseño de Copenhague, Estocolmo, Oslo y otros lugares comenzaron a formular una singularidad en las regiones nórdicas y educaron en la idea de mirar hacia el pasado y hacia el futuro simultáneamente.
Mirar hacia atrás, a la artesanía, y mirar hacia adelante, a la función. Porque la funcionalidad de la Bauhaus consistía en eliminar los detalles y mirar la funcionalidad. Si observas los muebles nórdicos de la década de 1850, están todos influenciados por algo como el rococó francés.
Posteriormente llegó una manera modernista y funcionalista de afrontar la creación de un mueble. Kaare Klint creó el concepto de diseño danés transformando elementos tradicionales con formas y materiales modernos para la Iglesia de Grundtvig. Más que “diseño danés” es una nueva forma de ver el funcionalismo adaptada a nuestros propios materiales. Klimt se convirtió en el primer profesor de la Academia y fue influyendo a otros diseñadores como Jacobsen, Poul Kjærholm, Hans J Wegner… somos un país pequeño así que todos se influyeron mutuamente, y todo ocurrió en un lapso de 10 o 20 años.
Eran colegas y competidores, pero se desafiaban entre sí. Buscaban una manera de diseñar muebles en un estilo nórdico con nuestros materiales, de una manera más moderna, pero manteniéndose fieles a sus orígenes.
Hans J Wegner y otros miraban un poco más hacia el pasado. Arne Jacobsen nunca miró atrás, siempre miraba hacia adelante.
Tobias Jacobsen
Mi abuelo creció en una familia muy tradicional y rica y sin embargo pintó su habitación de blanco. Nadie tenía una habitación blanca. Buscaba deshacerse de la forma de vida tradicional, con demasiados muebles, demasiados colores, demasiado recargada. Siempre buscaba la modernidad.
Christian Andersen
Wegner y otros ponían más énfasis en el pasado que en el futuro. Jacobsen no. Vio una oportunidad de crear su propia identidad.
Así que también era visionario.
Christian Andersen
Era un visionario y tenía curiosidad por la tecnología. Tenía curiosidad por el interior tanto como por el exterior del edificio. Era muy pragmático en su arquitectura, no hay nostalgia en Jacobsen. Diseñando el edificio del Banco Nacional no se siente tentado a hacer una barandilla de madera, hace una barandilla de acero naranja combinada con vidrio. No se siente tentado a caer en la facilidad de usar lo que siempre se ha usado. Siempre tiene curiosidad por inventar algo nuevo o ponerlo en un nuevo contexto.
Eso también es una responsabilidad para Fritz Hansen. No pueden ser nostálgicos.
Christian Andersen
Fritz Hansen utilizó el conocimiento y la visión de futuro de Arne Jacobsen para cambiar sus estrategias comerciales. La información y el conocimiento que Arne trajo de los EEUU fue de un valor incalculable para la marca, que pudo exhibir sus productos en ferias internacionales e incluso en el MOMA.
Dedicó mucho tiempo al desarrollo de producto, desafiando en términos de tecnología, experimentando con espumación y modelado o materiales como el polietileno, plástico etc, que eran muy poco comunes en los años 50 y 60.
Eso también es una responsabilidad para Fritz Hansen. No pueden ser nostálgicos.
Christian Andersen
Fritz Hansen utilizó el conocimiento y la visión de futuro de Arne Jacobsen para cambiar sus estrategias comerciales. La información y el conocimiento que Arne trajo de los EEUU fue de un valor incalculable para la marca, que pudo exhibir sus productos en ferias internacionales e incluso en el MOMA.
Dedicó mucho tiempo al desarrollo de producto, desafiando en términos de tecnología, experimentando con espumación y modelado o materiales como el polietileno, plástico etc, que eran muy poco comunes en los años 50 y 60.
¿Crees que el hotel SAS como obra de arte es posible hoy en día?
Christian Andersen
No he encontrado a un arquitecto que haya hecho lo mismo que Arne Jacobsen en el SAS. Un trabajo tan completo.
Tal vez en un lugar cultural, o un restaurante, o un espacio de marca… pero rara ves una sede central o algo tan significativo donde donde los arquitectos también hayan diseñado los muebles, los pomos de las puertas, las luminarias, eligen el mármol para la escalera…
Hay ejemplos de hoteles, centros culturales o iglesias donde los arquitectos diseñan el interior, el espacio exterior y la experiencia, pero no a un nivel tan profundo.
Ya no se ven muchos proyectos de ese tipo. Quizás hay arquitectos de renombre a los que se les permite hacer un hotel en algún lugar, pero no diseñan los muebles. Eligen los muebles. Es difícil encontrar un ejemplo tan completo como el SAS.
También fue una época en la que había muchas pequeñas industrias locales en Dinamarca. Eran pequeñas pero eran las mejores y compartían la filosofía de Jacobsen. Todas quisieron participar en el proyecto Así que eso también es un logro en sí mismo, conseguir que todas esas marcas y fábricas trabajaran en un solo proyecto.
¿Es difícil abstraerse a uno mismo y a su creación del legado de su abuelo?
Tobias Jacobsen
Cuando el abuelo es Poul Kjærholm o Poul Henningsen, Kaare Klint, todos estos grandes nombres, deshacerse de esta historia sería algo estúpido. Ellos realmente crearon una forma de pensar que es hermosa e interesante. Es difícil diseñar cualquier cosa, porque todo fue refinado en esa época.
Christian Andersen
Sin embargo Tobias no es el heredero del legado de Jacobsen. Él no tiene que cumplir la promesa de Jacobsen, está libre de esa pesada carga. Tiene la libertad de buscar inspiración, pero con la enorme ventaja de poder mirar más profundamente en el legado de su abuelo.
Tobias Jacobsen
Durante muchos años traté de hacerme a mí mismo, pero todo el mundo quiere hablar de mi abuelo y ver su influencia en mi trabajo. En algún momento fue un poco cansado, por supuesto. Cuando era joven quería que la gente me respetara por lo que yo era, no por el legado de Arne Jacobsen. En cualquier caso estoy muy orgulloso de mi trabajo sobre él, especialmente en los últimos años, tratando de que las nuevas generaciones lo conozcan y lo comprendan.
Si hablamos de nuevos materiales y técnicas, de las posibilidades tecnológicas ¿qué creéos que Arne Jacobsen habría intentado hoy?
Tobias Jacobsen
Mi abuelo siempre estaba explorando ideas diferentes. Creo que le fascinaría la nueva forma de tejer textiles y materiales. Creo que habría explorado las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial le habría fascinado. La habría utilizado de manera sensata.
Christian Andersen
Estaba muy preocupado por hablar también sobre el uso y la sensación de sus espacios. Tenía curiosidad por todas las soluciones, todas las cosas que la gente debería usar, para qué sirven sus cosas y para qué sirven sus diseños.
Creo que le habría interesado muchísimo toda la escena sobre la sostenibilidad y la arquitectura y el rediseño de nuestros espacios actuales, y no construir nuevos todo el tiempo.
Creo que habría sido un alivio para él no hacer algo nuevo, sino poder remodelar, reutilizar, rediseñar espacios y productos. Reimaginar, reutilizar, recomponer…
Jacobsen siempre estuvo un poco por delante de su tiempo. Desafió constantemente el diseño. Siempre profundiza un poco más allá que los demás.
Si observas sus productos, siempre están un paso por delante. Es difícil. Es un desafío. Es casi imposible. Pero tenía la fe y curiosidad para hacer las cosas.
Allerød. 19-08-2024
Puedes leer la entrevista completa en el número 4 de nuestra revista MORADA.